A continuación, voy a destacar los principales puntos de un artículo que nos muestra la fragilidad de nuestro mundo producto de la pérdida antropogénica de la biodiversidad. Se basa en un informe emitido por el PNUMA durante el presente año en que se alerta sobre la disminución global de las especies polinizadoras y sus potenciales efectos. Su importancia se ve reflejada en que de las aproximadamente 100 especies vegetales cultivadas por el hombre, 90% de las cuales constituyen la base de nuestra alimentación, 71 son polinizadas por abejas. Los principales puntos del informe son los siguientes:
1) Polinización y polinizadores
La polinización es vital para nuestros ecosistemas y actividades humanas sosteniendo los hábitats naturales y contribuyendo a las economías locales y globales (la contribución de los polinizadores a la producción de cultivos utilizados para la alimentación humana representa un 9,5% del valor total de la producción mundial de alimentos).
2) Variación de las poblaciones de polinizadores domésticos
El valor económico estimado de los servicios prestados por los polinizadores domésticos y silvestres se estima en unos 22,8- 57 billones de euros. La abeja doméstica (Apis mellifera) es la especie polinizadora más importante ya que la productividad de los cultivos de ciertas frutas, semillas y almendras decrece en más de un 90% sin estos eficientes polinizadores. Se ha observado en diferentes regiones del mundo una sostenida disminución de las poblaciones de esta especie polinizadora:
Desde 1965, se ha reportado la disminución en el número de colonias de abejas domésticas en Europa. En 1998, apicultores han observado inusual debilidad y mortalidad en sus colonias, siendo particularmente alta la mortalidad a finales de invierno y comienzos de primavera.
Sólo en Estados Unidos, el valor económico de los cultivos polinizados por abejas durante el año 2000 era estimado en 14,6 billones de dólares. Desde el 2004, se ha observado la mayor disminución en el número de colonias de abejas de los últimos 50 años. Los científicos han bautizado a este fenómeno mundial como “Colony Collapse Disorder (CCD)” y se caracteriza por una repentina muerte de gran número de las abejas obreras en una colonia, en que la reina generalmente sobrevive y las restantes abejas de la colonia son reticentes a alimentarse normalmente.
En años recientes, apicultores de China han enfrentado una inexplicable reducción en el número de colonias, sin embargo, no hay estudios suficientes publicados al respecto. Algunos vestigios de disminución se han encontrado también en Australia y Africa.
3) Factores conducentes a la inestabilidad de las poblaciones
Entre los factores descritos por el informe se encuentran el deterioro de los hábitats y las prácticas agrícolas y de apicultura, entre otras cosas, como consecuencia de la degradación de los ecosistemas, el incremento de enfermedades y especies invasoras, contaminación, uso de herbicidas e insecticidas, alimentación de las colmenas, transporte y manejo de las colonias por los apicultores. Cabe destacar la relación que se establece entre el cambio climático y este fenómeno puesto que se han modificado los períodos de florecimiento y la distribución de muchas especies vegetales de las cuales dependen estrechamente todos los polinizadores.
4) Recomendaciones
Principalmente apuntan a la conservación de los hábitats, la agricultura alternativa, la utilización de otros tipos de polinizadores y medidas para preservar los estadíos larvales que en general son más vulnerables a los efectos de las acciones humanas sobre el ecosistema.
Fuente:
Aporte de BENITO HENRÍQUEZ ZÁRATE
